Yo, mi, me, con..miga

domingo, 30 de agosto de 2015

Galeón



En la terraza de un bar de la playa están sentados un viejo y un niño. El mar acaba de purgarse con un temporal y ha dejado la arena cubierta de algas rojas muy amargas, pero las aguas ya se han calmado y el viejo le señala al niño un buque explorador fondeado en un punto del horizonte que está sacando del abismo un galeón de bucaneros que se hundió en tiempos muy remotos. 
Mira, le dice el viejo, aquel buque tiene un brazo articulado que ha bajado a mil metros de profundidad y ha introducido una cámara entre las cuadernas de la nave donde se ven cofres, vajillas, arcabuces y una sirena color de rosa esculpida en el bauprés. En un camarote aparece todavía la calavera del capitán coronada de lapas. El niño comienza a soñar con los ojos muy abiertos.




Todos nuestros juguetes se han roto, excepto los cuentos que nos contaron en la niñez y que de una forma u otra nos llevan siempre a la isla del tesoro. 
Gracias al sistema de detección por satélite existen no menos de 4000 barcos localizados en el fondo del mar -trirremes, carabelas, goletas, galeones- que naufragaron a lo largo de la historia. 
Lo que en el Mediterráneo eran dioses, en el Caribe y en los mares el Sur fueron piratas. Cada abismo contiene sus propios héroes sumergidos, como nuestra imaginación alberga los deseos más remotos. 
Existen empresas especializadas en sacar a la superficie estos barcos cargados de oro o de esculturas de mármol, lo mismo que la razón extrae las imágenes simbólicas que elabora el cerebro en la oscuridad de los sueños y las convierte en sensaciones a pleno sol.




El viejo le cuenta al niño un cuento de corsarios y en la imaginación del niño se sumerge la figura soñada de un barco fantasma gobernado por unos piratas berberiscos que llegaron a esta playa para raptar a cuantas mujeres hermosas encontraban. 
El viejo va aflorando desde el fondo de su memoria la historia de Simbad el Marino, la del Capitán Nemo, la de Lord Jim y otros cuentos, juguetes que le habían regalado en la infancia y nunca se le rompieron. Ahora los saca a la superficie, los deposita en la imaginación del niño y estos relatos se hunden en su cerebro hasta alcanzar el fondo de los sueños. 
Cuando el viejo muera y su cuerpo descienda al abismo como una nave derrotada, un día, al recordar los cuentos que le había contado, el niño lo salvará de las aguas como ese buque explorador está rescatando ahora un galeón de bucaneros que lleva en su vientre cofres repletos de monedas de oro, una sirena labrada en el bauprés y otros tesoros.




Manuel Vicent





Sin duda, esta es la mejor herencia que podemos dejar : que nuestros nietos nos recuerden con el mismo cariño con el que los hemos criado.
Me emociono cada vez que mis hijas nombran a mi padre, porque el que yo lo tenga presente todos los días de mi vida no implica el que ellas - con sus atareadas vidas - lo tuvieran que tener.
Y es que el amor , como la energía, ni se crea ni  se destruye, solo se transforma.
Buen día

miércoles, 12 de agosto de 2015

Exorcismo


Sé que estoy escribiendo
para exorcizarme
y sacarme de adentro
la andanada de angustias
persiguiéndome.

Aún no sé muy bien
quién es esta nueva mujer que soy
-como no se conoce la ciudad después del cataclismo,
perdidos los puntos de referencia de tal o cual edificio-
Conozco que estoy fallada
como una telaraña geológica
llena de ranuras por donde brotan
perennes pasados cuyos sismos no se pueden medir
con ningún osciloscopio
premeditado.

Adivino a tientas, toco, presiento,
el fin de una dolorosa
pero todavía dulce
ceguera.






Gioconda Belli.


Yo si se quien soy, de donde vengo y a donde quiero ir, aunque a veces las circunstancias de la vida  te nublen un poco el horizonte.
Os deseo un buen día.

domingo, 9 de agosto de 2015

Reflexiones




¡Que cerca sentimos a algunos, que están muertos; y qué muertos nos parecen otros que aún viven!



Cuando un estúpido hace algo que le avergüenza siempre dice que cumple con su deber



Los años arrugan la piel, pero renunciar al entusiasmo arruga el alma



Se es viejo cuando se tiene más alegría por el pasado que por el futuro



El mago hizo un gesto y desapareció el hambre, hizo otro gesto y desapareció la injusticia, hizo otro gesto y se acabo la guerra. El político hizo un gesto y desapareció el mago.



Cuando veas a un gigante, examina antes la posición del sol, no vaya a ser la sombra de un enano
 Novalis






Espero que esteis pasando un verano digno de ser recordado.

martes, 4 de agosto de 2015

La casa de las flores



Preguntareis: Y dónde están las lilas?
Y la metafísica cubierta de amapolas?
Y la lluvia que a menudo golpeaba
sus palabras llenándolas
de agujeros y pájaros?

Os voy a contar todo lo que me pasa.

Yo vivía en un barrio
de Madrid, con campanas,
con relojes, con árboles.
Desde allí se veía
el rostro seco de Castilla
como un océano de cuero.

Mi casa era llamada
la casa de las flores, porque por todas partes
estallaban geranios: era
una bella casa
con perros y chiquillos......






Neruda
De : España en el corazón 
(Fragmento)





Solo me faltan los perros y los chiquillos, todo lo demás está.
Y mis chiquillos están en  el lugar mas confortable y calentito : en mi corazón.
Buen día.

sábado, 1 de agosto de 2015

Que indefinible tristeza, cuando uno escucha...



Que indefinible tristeza, cuando uno escucha 
las palabras casi sin sentido 
que surten de miles de labios 
y que se van, sin orden, amontonando en el aire, 

las palabras como insectos que liban 
en miles de orejas ambulantes, las palabras 
que se disuelven, como olas, sobre la playa de la tarde, 
adelgazando, trocándose en espuma, 
en humedad, en nada. Y qué tristeza finísima, 
qué sombra, qué aire de tristeza, 
cuando uno piensa que es imposible comparar 
a estos seres que se agitan con las nubes 
que circulan por las calles del cielo, 
o con el ir y venir del viento 
entre las hojas de los árboles. 


Y sobre todo, qué inmenso desconsuelo 
cuando uno se da cuenta 
de que estas tristes reflexiones en torno 
a estas criaturas que giran en la tarde 
lo han convertido a uno en alguien 
infinitamente abandonado, en alguien que, 
desde el otro lado del tiempo, escucha, 
lleno de soledad, el fragor 
de éste monótono rebaño de corazones.





Alfonso Canales





Ya estamos en agosto, que pronto se pasa el tiempo cuando se pasa bien. Sin embargo para según quienes el tiempo se arrastra lentamente, lástima.
Buen finde.