Quién iba a prever que el amor ese informal
se dedicara a ellos tan formales
mientras almorzaban por primera vez,
ella muy lenta y él no tanto
y hablaban con sospechosa objetividad
de grandes temas en dos volúmenes,
su sonrisa.... la de ella
era como un augurio o una fábula
su mirada..... la de él tomaba nota
de cómo eran sus ojos....los de ella
pero sus palabras....las de él,
no se enteraban de esa dulce encuesta.
Como siempre o como casi siempre,
la política condujo a la cultura
así que por la noche concurrieron al teatro
sin tocarse una uña o un ojal
ni siquiera una hebilla o una manga
y como a la salida hacía bastante frío
y ella no tenía medias,
sólo sandalias por las que asomaban
unos dedos muy blancos e indefensos
fué preciso meterse en un boliche
y ya que el mozo demoraba tanto
ellos optaron por la confidencia,
extra seca y sin hielo por favor,
cuando llegaron a su casa.... la de ella,
ya el frío estaba en sus labios...los de él,
de modo que ella , fábula y augurio,
le dió refugio y café instantáneos.
Una hora apenas de biografía y nostalgias
hasta que al fin sobrevino un silencio,
como se sabe en estos casos es bravo
decir algo que realmente no sobre,
él probó , sólo faltaba que me quede a dormir,
y ella probó , porqué no te quedás,
y él , no me lo digas dos veces
y ella , bueno porqué no te quedás,
de manera que él se quedó , en principio
a besar sin usura sus pies fríos... los de ella
después ella besó sus labios....los de él
que a esa altura ya no estaban tan fríos
y sucesivamente así
mientras los grandes temas
dormían el sueño que ellos no durmieron.
Mario Benedetti.
Me encanta. Mira que lo he leido veces, pero aunque sean palabras viejas, siempre me saben a nuevas.
Es lo que tiene ser un genio como Benedetti.
Feliz domingo.
se dedicara a ellos tan formales
mientras almorzaban por primera vez,
ella muy lenta y él no tanto
y hablaban con sospechosa objetividad
de grandes temas en dos volúmenes,
su sonrisa.... la de ella
era como un augurio o una fábula
su mirada..... la de él tomaba nota
de cómo eran sus ojos....los de ella
pero sus palabras....las de él,
no se enteraban de esa dulce encuesta.
Como siempre o como casi siempre,
la política condujo a la cultura
así que por la noche concurrieron al teatro
sin tocarse una uña o un ojal
ni siquiera una hebilla o una manga
y como a la salida hacía bastante frío
y ella no tenía medias,
sólo sandalias por las que asomaban
unos dedos muy blancos e indefensos
fué preciso meterse en un boliche
y ya que el mozo demoraba tanto
ellos optaron por la confidencia,
extra seca y sin hielo por favor,
cuando llegaron a su casa.... la de ella,
ya el frío estaba en sus labios...los de él,
de modo que ella , fábula y augurio,
le dió refugio y café instantáneos.
Una hora apenas de biografía y nostalgias
hasta que al fin sobrevino un silencio,
como se sabe en estos casos es bravo
decir algo que realmente no sobre,
él probó , sólo faltaba que me quede a dormir,
y ella probó , porqué no te quedás,
y él , no me lo digas dos veces
y ella , bueno porqué no te quedás,
de manera que él se quedó , en principio
a besar sin usura sus pies fríos... los de ella
después ella besó sus labios....los de él
que a esa altura ya no estaban tan fríos
y sucesivamente así
mientras los grandes temas
dormían el sueño que ellos no durmieron.
Mario Benedetti.
Me encanta. Mira que lo he leido veces, pero aunque sean palabras viejas, siempre me saben a nuevas.
Es lo que tiene ser un genio como Benedetti.
Feliz domingo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario