" Tú perseveraste en el empeño. Eso fue lo que te trajo la buena suerte" le dijo el profesor de piano a la niña al darle el lazo verde de la buena suerte.
Desde entonces, siempre que tocaba el piano, la pequeña llevaba puesto el lazo, porque le recordaba que era su propio esfuerzo lo que le traía la buena suerte.
Elizabeth Koda-Callan
Un hombre inteligente ese profesor. Igual que él, considero que la mayor suerte es el tesón, quien lo poseee en su ADN, llegará donde se proponga.
Buen día.
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