Ayer fui al cementerio en que enterré mis anhelos
y a uno de ellos le dije
(así por decir algo)
Levántate y anda.
Y el yacente fue y
para mi sorpresa
saludó se irguió y se puso a andar
¿A cuántos más habré sepultado a destiempo?
¿Cuántos otros afanes habré enterrado vivos?
Saiz de Marco
Si los anhelos se han dejado enterrar sin presentar batalla, muy vivos no estarían, la verdad.
Buen día.
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