Yo, mi, me, con..miga

sábado, 28 de marzo de 2020

Sabor de vendimia



Recuerdo el terror de las primeras arrugas.


Pensar: Ahora sí. Ya me llegó la hora.

Las líneas de la risa marcadas sobre mi cara

aun en medio de la más absoluta seriedad.

Yo, frente al espejo,

intentando disolverlas con mis manos,

alisándome las mejillas, una y otra vez,

sin resultado.

Luego fue la mirada furtiva de mi reflejo

en los escaparates

preguntarme si la luz del día las haría más evidentes,

si el que me observaba desde la otra acera

estaría censurando mi incapacidad de mantenerme joven,

incólume ante el paso del tiempo.



Viví esas primeras marcas de la edad

con la vergüenza de quien ha fallado.

Como una estudiante que reprueba el examen

y debe caminar por la calle

con las malas notas expuestas ante todos.



–Las mujeres nos sentimos culpables

por envejecer,

como si pasada la juventud de la belleza,

apenas nos quedara que ofrecer,

y debiéramos hacer mutis;


salir y dejar espacio a las jóvenes,

a los rostros y cuerpos inocentes

que aún no han cometido el pecado

de vivir más allá de los treinta o los cuarenta–




No sé cuándo dispuse rebelarme.

No aceptar que sólo se me concedieran como válidos

los diez o veinte años con piel de manzana;

sentirme orgullosa de las señales

de mi madurez.




Ahora,

gracias a estos razonamientos

cada vez me detengo menos

frente al espejo.

Paso por alto

la aparición de

inevitables líneas

en el mapa de vida del rostro.




Después de todo,

el alma,

afortunadamente,

es como el vino.

Que me beba quien me ame,

que me saboree.


                                                          

                                                          



 Gioconda Belli





Yo asumo mis canas y mis kilos como bagaje de la vida vivida.
Envejecer es el precio de vivir. Solo hay que saber hacerlo con elegancia.
Es inútil querer parar el reloj biológico.
Y quien no se asuma, lo tiene crudo en estos días de encierro en los que vivimos 24-7 con nosotros mismos y no hay nada que nos distraiga de nuestra riqueza o pobreza interior.
Vamos a ser optimistas, ya nos falta un dia menos para salir a respirar de nuestra primavera florida. Tendríais que ver mi terraza como está de flores, ella no entiende de confinamientos.
Buen finde !!

miércoles, 25 de marzo de 2020

Cuando el tiempo ya es ido......



Cuando el tiempo ya es ido, uno retorna
como a la casa de la infancia, a algunos
días, rostros, sucesos que supieron
recorrer el camino de nuestro corazón.

Vuelven de nuevo los cansados pasos
cada vez más sencillos y más lentos,
al mismo día, el mismo amigo, el mismo
viejo sol. Y queremos contar la maravilla
ciega para los otros, a nuestros ojos clara,
en donde la memoria ha detenido
como un pintor, un gesto de la mano,
una sonrisa, un modo breve de saludar.

Pues poco a poco el mundo se vuelve impenetrable,
los ojos no comprenden, la mano ya no toca
el alimento innombrable, lo real.







Josefina García-Marruz






Después de tantos días de confinamiento, ya le hemos dado vuelta a todos nuestros recuerdos, los pasados, los presentes y hasta los forjados para el futuro inmediato y que hemos tenido que dejar aparcados por obligación.
Supongo, yo siempre optimista, que una vez superada esta dolorosa etapa, sacaremos conclusiones de como afrontar nuestra vida y no caerán en saco roto como en las anteriores crisis vividas.

Deseo que vuestro día a día sea cuando menos, plácido y que no dejéis de hacer planes para el futuro, porque de esto saldremos y espero que reforzados.

Disfrutar de los niños, de las flores, del sol......de todo lo que tengáis a vuestro alcance, y si no inventarlo !!

jueves, 19 de marzo de 2020

La fuerza del amor



"Te moldearé", le dijo el hacha al pedazo de hierro mientras descendía con toda su fuerza sobre uno de sus costados.
Pero a cada golpe que le daba iba perdiendo su filo, hasta que después de un rato aquella herramienta no pudo más, había quedado completamente obtusa.



"Déjenmelo a mí", repuso el serrucho mientras clavaba sus dientes en el pedazo de hierro, los cuales fueron desapareciendo uno por uno.




"Yo me encargaré de modelarlo", profirió con arrogancia el martillo, mientras se burlaba de sus compañeros que habían fracasado. Pero después de varios golpes se le quebró el mango y se le desprendió la cabeza.






"¿Me permiten probar?", inquirió humildemente una pequeña llama. Los tres se rieron a carcajadas, pero se lo permitieron porque estaban convencidos de que también iba a fracasar. 

Sin embargo, aquella llamita cubrió el pedazo de hierro; no se desprendió de él, lo abrazó y lo abrazó hasta volverlo blando y darle la figura que quería.




Aquella pequeña llama logró lo que las otras tres poderosas herramientas no pudieron alcanzar. 




Así es el amor.



Hay en el mundo corazones tan duros que pueden resistir los hachazos de la ira, los dientes del encono, y los golpes de orgullo y del rechazo, pero por más severo que sea el corazón de la persona, no podrá resistir los embates del amor; porque el amor es la fuerza más poderosa de este mundo.









De por ahí.







Este año el día del padre nos pilla encerrados en casa, buena ocasión para que lo pasen juntos los padres y los niños, ya que el tiempo es el mejor regalo que se puede hacer.
Y a los padres que nos pilla lejos de nuestros hijos y nietos, con una buena videoconferencia a cuatro nos conformaremos, que remedio.
Pero ya llegarán otros días, por mas negra que sea la tormenta, acaba saliendo el sol !!
Cuidaros !!

lunes, 16 de marzo de 2020

Todo y nada


Si tú eres la montaña,
yo soy la flor, el aire, la llanura,
la fuente limpia y pura,
el río que te baña,
la hondonada que te cubre
y el paisaje;
el zafiro del cielo y la nube de encaje.

Todo y nada.






Susana March








Desde este encierro involuntario, pero necesario,  me he obligado a poner algo esperanzador.
Saldremos de esta porque somos fuertes y solidarios en la adversidad, así que ánimo !!
Como ese arco iris que  asoma, pronto pasará la oscuridad y espero que salgamos reforzados.